Esta semana pintaba parecía que iba a ser tranquila, iba a trabajar todos los días desde casa, ya que en la Ciudad de México no paraba de llover, un poco de desaceleración después de semanas de networking y prepararme para el fin de semana que será mega movido.
La cosa no resultó como se preveía.
Mi gran amigo y socio Diego Rendón nos invitó, a un selecto grupo de amigos, a un evento el miércoles que empezaría a las 8a.m. y acabaría alrededor de las 6p.m. A lo que mi intuición dijo “vamos”.
Por si fuera poco para alterar mi rutina de pronto veo en el Substack que
convocó a una reunión de substackeros en CDMX a reunirnos presencialmente precisamente el miércoles a las 7p.m. No me encantan las reuniones improvisadas y así pero no podía dejar pasar la oportunidad de compartir en persona con otras personas que comparten la pasión por la escritura, así que de nuevo esa vocecita me dijo “vamos”.El resultado fue extraordinario.
En el Certiprof Summit al que me invitó Diego aprendí muchísimo e hice contactos clave, de lo cual saldrán muchas notas próximamente, y el encuentro en la librería La Americana en la Condesa fue muy enriquecedor.
La variedad de escritores que nos reunimos fue increíble, desde quien es apasionado de la moda, quien está en el mundo de la música, hasta quien aún se encuentra buscando su voz, lo que pudimos compartir nos enriqueció muchísimo.
Vislumbro en el futuro muchas colaboraciones tanto en Substack como en otros espacios.
Porque esto es lo que pasa cuando sales de tu zona de confort, cuando te mueves, destinando tiempo, energía y recursos en aprender, conectar con otros, exponerte. Las oportunidades no se van a presentar en tu puerta, las reacciones no suceden decretando en tu sillón.
Agita las moléculas del universo, colócate donde están pasando las cosas, conecta con tu tribu, exprésate, atrévete a hacer cosas diferentes y en ese momento verás como te pasan mucho mejores cosas.
— J.
Que gusto encontrarnos :)